miércoles, 29 de febrero de 2012

Como tocas, como eres... ( tipos y moldes de guitarrista) final.

El solista. Encuentra múltiples maneras de trasmitir. Alejado de las letras dibuja formas que van más allá de un concepto único. Evoca algo muy fuerte, indefinible pero muy asociado con la interpretación personal de cada oyente. Abre espacios blancos donde el receptor se dibuja de acuerdo al color e intensidad. En definitiva debe de ser un maestro ejecutante. No admite errores puesto que tiene que cubrir la misión vocálica así la melodía se vuelve más importante aun. Se requiere de guitarras especializadas y un trabajo minucioso en los efectos.

El cantautor. También visto como trovador utiliza el instrumento de diversas formas. SI bien la esencia la centra en las letras hay muchos que acompañan la labor escrita con una impecable técnica que en varios casos se vuelven sellos propios definiendo su música como un producto aislado y muy especial. La virtud de los buenos cantautores radica en que, solos, pueden generar ambientes completos de musicalidad y calidez. Tienen una perspectiva musical más amplia de cada una de sus obras y conjugan todos los elementos necesarios para colmar las expectativas con su capacidad. Guitarras acústicas como materia prima, el nylon muchas veces sobre lo metálico y horas de horas de trabajo poco o casi nada improvisado.


Pero al hecho. La ejecución y el estilo se van a instalar desde un inicio. Uno aprende a tocar para oírse y verse como el ídolo que admiran. De aquí las variantes y ejecuciones con estilos diversos. Incluso cuando ejecutemos piezas de funk, metal, blues o pop trataremos de imitar posiciones y maneras de los creadores.
La copia es básica en el aprendizaje, es la motivación del guitarrista. Un músico que carezca de modelo no podrá pasar de la “Bamba”. Así empieza el bagaje de estilos. Después de un tiempo por la acústica muchos empezamos el camino de las micas y modelos, buscamos la potencia de las guitarras eléctricas, aunque siempre retornamos a la primera. Aquí empieza lo bueno, luego de largo sufrir podemos imitar, luego, mucho más allá, está la función propia, el estilo, pero ese es otro tema.

lunes, 6 de febrero de 2012

Como tocas, como eres... ( tipos y moldes de guitarrista) 2da parte

El punk. De forma contundente, el punk nace con el poder de overdrives o distorsiones sin mayor arreglo, un riff básico del bajo y un puñado de “quintas” encadenadas. El punk enarbola la actitud, desecha el estilo y las formas correctas, toca fácil porque el mensaje prima sobre la base musical. El solo es parte de los riffs y desata emoción por lo básico que resulta ya que su esencia radica en la emoción y el momento. Cualquier guitarra es buena mientras funcione. El punk inicial no acepta variaciones que compliquen la fluidez de los gritos y el poder. Las corrientes que derivaron son las que tal vez más enojan a sus fanáticos iniciales. La descripción es de la forma natural en que el punk fue concebido.


El rock, siendo el género que más ramas ha generado, posee dos brazos básicos: hard y "soft". Estos dos van a izar banderas que terminarán en contradictoria.  El hard va a pensar en estructuras fijas y solos pentatónicos  sacados de los primeros guitarristas de blues pero con diferentes efectos y velocidades pero similares en la forma. El guitarrista va a buscar la diversión en su poderío y su armonía exacta, goza de las letras que no buscan vanidad ni enredo, tiene velocidad y estilo, utiliza infinidad de modelos pero para ejemplo está la Gibson SG. Mezcla exitosamente escalas de blues y quintas apasionadas, es rápido y lento cuando quiere, tiene autonomía y arrastra al público, riffea entre coro y coro y comulga bien con los demás a pesar de su vital importancia. Aquí el crédito es compartido, la banda es amada (o almenos el guitarra y la voz).

El otro derivado. El soft  se esparce en diversas variantes: entre lo alternativo, lo pop, el funk, el grunge y demás. Hace mezclas innovadoras pero pierde poder. Muchas veces goza de fórmulas y así se presenta a las nuevas generaciones. Genera combinaciones donde la potencia vocálica es cambiada por una ejecución mixta, la guitarra sigue teniendo protagonismo pero no es tan explosiva, es menos pasional, más atenta, melódica y menos inoportuna. El rock es suavizado para su mejor asimilación aunque conviva con muestras de sus raíces en ciertos intervalos. Posee un arsenal de métodos donde logran sincronizar la armonía y su poder inherente.

El blues, son pocos a contraste con los demás géneros. Alejado del rock-blues, este quiere comunión y mezcla lo virtuoso, que brilla melancólicamente, con la grandiosa voz de el intérprete. El blues, concebido como música de esclavos, va a generar tristeza y melancolía pero necesita también de un  virtuosismo y manejo adecuado. Aquí las pintas son lo de menos, la protagonista es la canción en su totalidad. Gibson de series altas y especializadas son requeridas para trémolos muy sentidos, la ejecución es limpia y emocionante. El blusero va a sentir cada nota y no la va a dejar libre hasta que le haya sacado el máximo placer. Va a encantar en todo momento, es de los géneros que más cerca del orgasmo están.

El grunge.  Concebidos en la misma época que el noise, va a tener una parte dentro de la historia musical por más que sus bases hayan desaparecido en algunos casos o transformado en otros. El guitarrista grunge mezcla una técnica simple, guitarras diversas, con efectos que se pasean de la línea limpia a distorsiones saturadas. Formula canciones de estructura fácil, coros desgarrados y soltura total en su ejecución, a pesar de su dejadez crean una especia de bulla melódica que la hace asimilable para muchos que no soportan ciertos géneros.  Los estribillos también son pegajosos, bis tras bis transmite el poder de su dejadez y desencanto del mundo, la voz es primordial y nuevamente la guitarra se presenta aniquilando con acordes más no con solos de estructura compleja.

El noise trabaja de manera diferente aunque también utilice la mezcla del clean con la saturación. El guitarrista busca una melódica atonal, una especie de gusto que se  adquiere luego de oírse mucho tiempo.Aparece en intervalos como una transformación de lo progresivo. A diferencia del grunge no tiene una estructura fija, vaga por tonos y cambios de tiempo indefinido. Pasan  de la velocidad  al letargo de improviso. Con o sin voz el guitarrista noise está concentrado en buscar nuevas maneras de encajar piezas en un rompecabezas que cambia constantemente. Más allá de las actuaciones personales el guitarrista noise busca una unión llena de encajes peculiares. Son impredecibles, con un gran sentido de la melodía en general y de la mezcla de sonidos que para la mayoría no tienen lógica.

Y sigue continuando.



jueves, 2 de febrero de 2012

Como tocas, como eres... ( tipos y moldes de guitarrista) 1ra parte



La advertencia: Lo siguiente no tiene pizca de base teórica musical y mucho menos es respaldado por una carrera solida en la ejecución así como en el estudio del instrumento y sus estilos.
A partir de la observación y del haber oído los primeros temas ejecutados, el neonato guitarrista se instala. El amor no puede establecerse de inmediato pero de que algo nace algo nace. Luego está la derivación múltiple, los contactos con las raíces tal vez con canciones románticas o con el rock de principios de los noventas. Posees una chonchudez inigualable si afirmas a Jeff Beck o BB King como los primeros genios dentro de tu cabeza. Empezamos con cuestiones comerciales, temas pasionales amenos de gozar con un pariente o amigo conocedor que nos encamine. Empecemos sin más demora.


Prospecto de Guitarristas según su genero:


E Metal va a buscar básicamente cuerdas delgadas que soporten bends altos, efectos saturados para mejores armónicos, palm mute a la altura del muslo, correas largas y guitarras con Floyd Rose para los desencajes de la palanca. La melena larga que muestre los dientes en intervalos de excitación, riffs y más riffs compuestos que desencadenen en solos de VELOCIDAD mezclada con un aprendizaje correcto de las escalas, el poder de la voz tiene que brillar con la guitarra compartir tonos y alturas. El género exige hiperactividad de parte de todos los integrantes y ejecuciones veloces y poderosas de su guitarrista.


El Pop buscará ante todo un acompañamiento melódico, que no dañe y que sea bien percibido de primera mano, la guitarra varía de acuerdo a lo que se quiere mostrar, la técnica debe de ser camaleónica, ni muy veloz ni muy lenta, vacilándose entre notas que resalten el acompañamiento y lo meloso de la letra sin sobresalir lo suficiente como para un “WOH”. El solo básico se repite o altera poco al  intro. El pop requerirá de mucho gel y una mezcla de diversas maneras de vestir, resalta ante todo la forma de movimientos: suaves con balanceos,  formas que nunca pero nunca opacan al vocalista.


El guitarrista funk va a tener que ser muy suelto, una Stratocaster cae a punto. La versión setentera sugiere la guitarra a la altura del pecho pero el rock funky dice todo lo contrario. La guitarra funky no está hecha para lucirse demasiado, acompaña sabrosamente (esa es su definición) y estalla con escalas peculiares y muy pero muy rítmicas. El solo funk motiva a dar gritos silenciosos, invita a gozar mientras se seduce con la guitarra, usar los Wah-Wah con el estilo “sucio” de tocar todas las cuerdas a la vez mientras ejecuta su parte primordial. El funk hijo del jamming no aprende nada de memoria, tiene una línea general por donde pasea de diversas maneras, improvisa naturalment, no es rígido en ninguna forma, juega con los demás y goza sin querer protagonismo. No tiene finales exactos, perdura la música mientras el pedal genera salidas y entradas constantes que se sostienen en la habilidad de estribillos y la potencia del bajo en sus figuras.


El alternativo, es muy diferente al pop, este es de una escuela netamente noventera, sus formas claras son lo de menos, con diversos tipos de guitarra buscan comulgar el poder de un efecto con la armonía desde inicio, es decir buscan explosión y musicalidad. El solo no es virtuoso pero si estructurado, bien balanceado y con efectos resaltantes que refuercen su salida para la repetición de un coro con más poder. El alternativo a través de su ejecución dispar a los demás busca una unión “cool”. No se ve que disfrutan, escuetos y melancólicos logran cautivar de maneras diversas. Combinan y mezclan sin perder su nihilismo y su amor por lo diferente. Satisfacen a un gran grupo, vagan por diversas corrientes y mezclan aquello que escape del común aunque muchas veces terminan siéndolo. 

Continúa...